Desde 1991, Berlín Adlershof se ha convertido en uno de los sitios más exitosos de alta tecnología en Alemania. Es aquí donde el Centro para la Energía Fotovoltaica ofrece a las empresas la oportunidad de arrendar diferentes combinaciones de laboratorios, espacios técnicos y de oficina, adecuados para sus necesidades particulares. Dieciocho unidades están distribuidas a través de nueve módulos similares, equipados con normas idénticas para la investigación, el diseño de nuevos procesos y desarrollo de productos.
En la planta baja se encuentra un taller con un puente grúa, así como un centro técnico de uso común, por encima del cual hay tres módulos de dos plantas de tamaño similar para oficinas y laboratorios. Los arrendatarios pueden usar un restaurante, ampliando la gama de opciones de comida dentro de la zona. El techo del vestíbulo está cubierto con grandes áreas de pruebas fotovoltaicas para la generación de energía. Entre los bloques, techos verdes optimizan el microclima del edificio y ofrecen a sus empleados un espacio para relajarse.
Loops verticales de tierra se utilizan para la generación de calor y energía fría. El núcleo de hormigón de las oficinas, así como la calefacción por losa radiante del atrio, utilizan energía renovable para garantizar la comodidad al interior del edificio. El proyecto también cuenta una cisterna de aguas grises y un sistema de pozo de absorción del agua de la lluvia para su reutilización.
El elemento de conexión del edificio es un atrio lleno de luz que se puede ver desde todos los pisos y tiene una gran escalera de caracol que define el espacio y lleva a los visitantes hacias las circulaciones laterales.